Organizaciones feministas buscan aprobar el aborto legal, al mismo tiempo critican la matanza por parte de un supuesto patriarcado opresor y asesino.
La doble moral es evidente, pero más aún las justificaciones para legalizarlo. Una constitución y tratados de derechos humanos pro vida, serán el condimento ideal para pedir la inconstitucionalidad de la norma ante la justicia.
Las feminazis, el brazo armado y combativo de las feministas. Al mejor estilo de las SS, ellas buscan asesinar fetos indefensos. Por lo menos, los judíos Polacos en el asedio de Varsovia pudieron defenderse, ellas le sacan todo margen, contando con la ventaja de su silencio.
Cambiaron sinagogas, por Iglesias, ahora su objetivo es pintar, defecar y destruir todo lo relacionado con la tradición, la VIDA misma. En cada marcha, el odio y el resentimiento es evidente, siendo la eterna justificación "el otro", esa maldita delegación excesiva de nuestros propios problemas. Cada caso es especial, pero, ante todo, la vida debe prevalecer sin excusas.
No seamos parte de este asesinato, la SOLUCION FINAL que plantean estos grupos minoritarios, no es la correcta. Quienes están a favor, paradójicamente están vivos, diferente el cantar seria, mientras sus cuerpos son empalados por pinzas y disueltos por químicos, todo eso en VIDA.
Mientras unas quieren abortar, otros quieren adoptar, agilizar el trámite de adopción podría ser una solución correcta, pero tomar la medida más radical es más fácil que eso. Educar sobre métodos anticonceptivos, parece difícil, pero matar es más rápido. Pero no todo es color de rosa, las violaciones y otras cuestiones denominadas terapéuticas, son un tema bastante complejo de abordar, pero ante todo debe primar la vida por sobre la muerte.
Que vivan los dos, ni uno menos, el odio o cualquier excusa no justifica la muerte, de NADIE.
