La idoneidad es el grado de pensamiento óptimo, cual es indispensable y esencial para realizar un buen trabajo, medido por diferentes factores. Si se carece de idoneidad, se torna dificultoso realizar una tarea determinada. Esta se adquiere con el estudio y a través del tiempo, sea la experiencia práctica diaria, poseer esta característica es importante para la vida en sociedad.
La idoneidad se entiende en sus dos aspectos el objetivo y el subjetivo.
Idoneidad objetiva: es la que emana de datos numéricos y que expresan la aptitud, mediante arbitrarias expresiones matemáticas. Si bien, es muy importante, los inertes números, no expresan una realidad total, solo un momento dado de conocimiento en un tiempo determinado, las típicas evaluaciones que miden arbitrariamente el conocimiento, en un periodo acotado.
Idoneidad subjetiva:
Según la propia persona: alejada de los fríos números, es el grado de emoción que se tiene sobre nuestra propia idoneidad, sobre nuestro conocimiento.
No puede ser medida por números ya que son abstracciones subjetivas del individuo, pero si medidas por las emociones de quién alega idoneidad.
Por lo general la tendencia es colocar está última en el rango más alto. Esto dependerá del ego y del nivel de realismo que posea la persona, sobre sus propias aptitudes.
Idoneidad según los terceros: es la visión más realista de la idoneidad y la que más peso tiene, incluso por sobre las objetiva y la personal.
Medida por las emociones ajenas, pueden destruir egos y alzar personalidades. En los lugares de trabajo, está en continua prueba, variando día a día.
Somos seres sociales, lo cual, no es gran cosa decirlo, pero lamentablemente si la persona se limita al pensamiento ajeno y a sus opiniones cambiantes, jamás podrá obtener la seguridad que de si misma deberá construir.
La idoneidad más importante y que sobrepasa incluso al pensamiento ajeno y objetivo, es la personalidad. Carecer de personalidad es la idoneidad más baja, quién no puede tolerar una crítica ajena, o un dato objetivo vivirá su vida dudando de si misma.
Seamos idóneos tengamos personalidad, que de esto se trata vivir.
